El Miedo Nunca Desaparese

Por Tamara Montes de Oca

Ningún niño debería vivir con miedo que toquen la puerta. 

Recientemente, alguien tocó mi puerta e inmediatamente mi corazón se aceleró. Desde que tengo memoria, me da pánico escuchar que toquen la puerta. Mil pensamientos pasan por mi mente, y me pongo a calcular la ruta de escape más rápida, por si acaso. De niña, un golpe en la puerta podía significar que me separaran de mi madre y de mi hermano.

Crecer siendo indocumentada le daba un significado muy fuerte a cualquier toque en la puerta. Podía leerlo en el terror del rostro de mi madre cada vez que alguien tocaba (un miedo que aún siente hasta el día de hoy, a pesar de que ya no tiene razón para temer porque ahora tiene un estatus legal).Siempre nos advertía que nunca abriéramos la puerta ni habláramos de nuestro estatus migratorio, ni siquiera con nuestros amigos más cercanos o maestros. Esa era su manera de ayudarnos a sobrevivir. Ahora lo entiendo.

A los nueve años, tuve un ataque de pánico cuando mi madre fue detenida durante una parada de tráfico de rutina. Siempre le tuve miedo a la policía. Con mucha batalla y apenas pudiendo respirar, le traduje al oficial, diciéndole que había sido mi error: le había dado las indicaciones equivocadas. Nos dejaron ir con una advertencia, pero tan pronto como nos alejamos, rompí en llanto. Temía lo peor: que la policía nos descubriera y se la llevara.

Ese miedo echó raíces profundas en mí, impactando la forma en que veo el mundo, cómo me muevo en él y cómo me escondo de él.

Asta ahora, después de veinticuatro años viviendo en este país y con un estatus legal temporal, el miedo a ICE persiste. Traumas como este no desaparecen fácilmente. Es una herida difícil de sanar. Hasta el día de hoy vivo con síntomas de trastorno de estrés postraumático, siempre lista para cualquier posibles amenaza y siempre tratando de estar "preparada". Esta ansiedad nunca desaparece. 

Me tengo que recordar a mí misma que ya no estoy en nada mas sobreviviendo y que me merezco sentirme libre del miedo que me ha mantenido escondida de muchas maneras. Ahora es mi responsabilidad hablar, más fuerte que nunca porque ninguna familia o niñe debería vivir con este tipo de miedo ni cargar con las cicatrices que deja.

Creo que la comunidad y el conocimiento serán nuestra mayor fortaleza en los próximos años. No estamos solos en nuestras luchas. Conocer nuestros derechos puede hacer toda la diferencia. Informémonos. Organicémonos. Alcemos la voz. Necesitamos luchar por un futuro donde ninguna familia ni niñes vivan con miedo de que toquen la puerta. 

¡Juntos jamás vamos a ser vencidos!

Maneras de Resistir y Organizarte con los Niñes en tu Vida:

Distribuye Tarjetas Rojas:

• Imprime y comparte las Tarjetas Rojas del Immigrant Legal Resource Center (ILRC) con tu comunidad: en tu vecindario, tiendas locales y, si es posible, en la escuela.

Construye Relaciones:

• Conoce a tus vecinos, a les compañeros de clase de tus hijes y haz conexiones. Una comunidad unida es una comunidad más fuerte.

Exprésate a través del Arte:

• Crea y comparte arte radical, sea lo que sea que esto signifique para ti (escribir, pintar, cantar), para inspirar acción y amplificar las voces de quienes están siendo impactados.

Crea Empatía a través de Historias:

• Comparte historias de resiliencia y valentía de tu propia vida o de tu comunidad para ayudar a les niñes a entender la importancia de apoyar a otres. También puedes usar libros para contar la historia de alguien más. Puedes usar esta lista de libros de Social Justice Books para empezar. 

Crea Conciencia:

• Comparte información sobre los recursos disponibles, derechos y formas de apoyar a quienes enfrentan desafíos relacionados con la inmigración. Las redes sociales o cualquier plataforma que tengas pueden ser un lugar accesible y efectivo para compartir esta información. 

Crea un plan de preparación familiar: 

• Cada familia debería tener un Plan de Preparación Familiar. Aunque esperamos que nunca tengas que usarlo, contar con un plan puede ayudar a reducir el estrés en situaciones inesperadas. El ILRC ofrece un Plan de Preparación Familiar completo para guiarte en el proceso.

Ya sea en el hogar, en el lugar de trabajo o en la escuela, conocer tus derechos y tomar medidas proactivas puede hacer una gran diferencia. Juntos, podemos solidarizarnos y luchar por la dignidad, seguridad y bienestar de todas las personas, sin importar su estatus migratorio.